El pleno del Ayuntamiento de Oviedo ha aprobado, con los votos de PP, PSOE y Convocatoria por Oviedo-IU, una proposición de este último partido para elaborar un Plan estratégico de renaturalización de Oviedo.
El portavoz de IU, Gaspar Llamazares, ha defendido la iniciativa, apoyándose en la existencia de "abundante evidencia científica" que avala la premisa de que los espacios verdes se relacionan con la mejora de las condiciones de salud física y mental de las personas.
La renaturalización urbana, ha explicado, consiste en la creación de itinerarios accesibles y espacios naturales de proximidad, de manera que se asegure el acceso a la naturaleza a toda la población y en especial a los más vulnerables. "Se trata, en definitiva, de permitir que la naturaleza vuelva a entrar en la ciudad identificando espacios sin uso y conectándolos a través de corredores ambientales", ha explicado.
Este plan estratégico, ha agregado, ha de comenzar por un estudio de la situación actual de la biodiversidad y de los espacios verdes, identificando después los ámbitos de actuación en cada barrio y las posibles acciones, generando nuevos espacios verdes "más complejos y biodiversos".
La propuesta ha contado con el apoyo del PSOE, cuyo concejal Juan Álvarez ha destacado que esta iniciativa pretende poner las bases para "defender" a quienes "tienen que pasar el verano huyendo del calor en el parque de su barrio", o a quienes se les inundan los locales por lluvias torrenciales, quienes respiran los humos del tráfico o a los niños que quieren jugar en las calles.
"Va de defender una ciudad más amable con sus ciudadanos, una ciudad que vea en la puesta firme por la transición ecológica una oportunidad para la transformación a favor de la sostenibilidad y que relance al tiempo un modelo económico con mucho más valor añadido", ha explicado.
"El cambio climático es una realidad y es una realidad a la que la ciudad debe adaptarse, porque el coste de la adaptación al cambio climático es menor que los costes asociados a los daños materiales y personales si no hacemos esta adaptación", ha apostillado.
Desde el Gobierno local, el concejal de Medio Ambiente, Ignacio Cuesta, ha defendido la postura "clara, firme y rotunda" del Equipo de Gobierno para continuar trabajando en favor del medioambiente y la sostenibilidad.
Ha mostrado asimismo la "plena disposición" del Ejecutivo local para, a partir del diagnóstico que se realice, "plantear medidas concretas que mejoren una situación que en Oviedo es ya muy buena".
El único grupo municipal que ha votado en contra de esta propuesta ha sido Vox. Su portavoz Sonsoles Peralta ha señalado que esta medida "no" es una prioridad para el Ayuntamiento "ahora mismo". La prioridad, ha dicho, deberían ser las familias ovetenses que "están pasando por un mal momento" porque no llegan a fin de mes o porque tienen a parte de su familia en el paro.
"Pero aquí estamos, centrando nuestros esfuerzos en los postulados de la Agenda 2030", ha criticado, asegurando que su partido no es negacionista del cambio climático. "Lo que no somos es borregos de las agendas globalistas", ha agregado.
Peralta entiende que en Oviedo ya existen áreas rurales con hábitats naturales, y ha defendido que eso es lo que hay que cuidar, ya que son "más que suficientes" con su flora y fauna. Le sorprende a Peralta que el PP le vaya a decir que sí "a sus socios" después de haber talado árboles en el Bulevar de Santullano, después de "ser incapaces" de hacer un mantenimiento adecuado de los árboles del Campo San Francisco, o después de programar la eliminación de los tilos en el Parque de San Pedro de los Arcos.