En un paso significativo hacia el fortalecimiento del empleo rural, el Gobierno de Asturias ha dado luz verde este jueves a un presupuesto plurianual de nueve millones de euros para la implementación del plan "Incorpórate al agro". Esta iniciativa ambiciosa tiene como objetivo primordial fomentar el empleo y facilitar el relevo generacional en el entorno rural, ofreciendo apoyo a nuevos profesionales que deseen integrarse en las actividades agrícolas y ganaderas. Como un avance notable, por primera vez el programa se extiende también a mayores de 40 años, ampliando así sus horizontes de inclusión.

El plan contempla dos períodos de solicitud, brindando la oportunidad a aquellos interesados de organizar y desarrollar su proyecto empresarial. Las personas que deseen acceder a estas subvenciones podrán hacerlo ya sea como titulares, cotitulares o socias de explotaciones agrarias. Este enfoque busca no solo facilitar la entrada de nuevos agricultores, sino también diversificar la estructura de las explotaciones en la región.

En cuanto a la cuantía de las ayudas, se establece un importe base de 50.000 euros por beneficiario. Sin embargo, las subvenciones tienen la posibilidad de ascender hasta los 100.000 euros para mujeres involucradas en el sector agrario, explotaciones que implementen medidas de prevención contra la fauna salvaje, así como para producciones ecológicas o lácteas en zonas montañosas, o aquellas producciones de alimentos que cuentan con una marca de calidad reconocida.

Un aspecto innovador de esta convocatoria es que, además de dirigirse a jóvenes agricultores de entre 18 y 40 años, ahora se incluyen también a aquellos que se encuentren entre los 41 y 56 años. Para poder acceder a estas ayudas, deberán demostrar que en los dos años anteriores a la solicitud no han obtenido ingresos agrarios que superen los 10.000 euros anuales. Esta medida se enmarca en un esfuerzo por revitalizar el campo y atraer a nuevos profesionales a actividades agrarias.

Adicionalmente, el Gobierno ha decidido permitir la compatibilidad entre las labores agrícolas y ganaderas con otras actividades económicas. Este fenómeno, conocido como agricultura a tiempo parcial o pluriactividad, se presenta como una estrategia efectiva para asegurar la viabilidad de las pequeñas explotaciones. A su vez, favorece la fijación de población en el medio rural y contribuye a la conservación de estas áreas, fortaleciendo así el tejido social y económico de la región.