El PP queda aislado en la propuesta de financiar la compra del edificio Calatrava con 4,86 millones.

El pleno del Ayuntamiento de Oviedo ha sido escenario de tensiones y discrepancias, especialmente entre el alcalde Canteli y las concejalas de Vox, quienes decidieron abandonar la sesión después de que el alcalde expresara que su partido le daba "pena".

La modificación presupuestaria para financiar la compra de la galería comercial del Edificio Calatrava con 4,86 millones de euros ha sido aprobada con el apoyo únicamente del PP, mientras que IU-Convocatoria por Oviedo se ha abstenido y PSOE y Vox han votado en contra.

La galería del Calatrava, propiedad del fondo Varia Structured Opportunities, acumula una deuda del IBI de más de 3,6 millones de euros y se espera que la compra ayude a garantizar el cobro de esta deuda una vez se concrete la operación.

El concejal de Urbanismo, Ignacio Cuesta, ha justificado la compra del edificio argumentando que se adquiere por un valor cuatro veces menor al de tasación y se permitirá el cobro de una deuda tributaria que de otro modo sería imposible.

A pesar de las críticas y dudas planteadas en el pleno, Cuesta ha anunciado que en junio comenzarán las labores de reforma y rehabilitación del espacio, con el objetivo de revitalizar la zona.

En medio de las discusiones, el alcalde Canteli manifestó su "disgusto, decepción y desencanto" con los partidos que votaron en contra de la financiación para adquirir el Edificio Calatrava, y lanzó duras críticas a Vox y al PSOE por sus posturas en el pleno.

Las concejalas de Vox decidieron abandonar la sesión después de que Canteli les reprochara y les pidiera ser educadas, lo que desencadenó un ambiente tenso en el pleno municipal.

En este contexto, las diferencias entre los diferentes partidos políticos han quedado patentes, dejando en evidencia las controversias y posturas encontradas respecto a la operación de compra del Edificio Calatrava.