La ciudad de Gijón ha inaugurado oficialmente la planta de tratamiento de la fracción resto de Cogersa (Consorcio para la Gestión de Residuos Sólidos de Asturias), que contribuirá significativamente a alcanzar el objetivo del 55% de material reciclado en el año 2025. El acto contó con la presencia del presidente del Gobierno del Principado de Asturias, Adrián Barbón, la presidenta Nieves Roqueñí, consejera de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico, y la delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa, entre otras autoridades.

Barbón resaltó la importancia de Cogersa como "un modelo de éxito" y destacó la voluntad conjunta de este Consorcio y los 78 ayuntamientos para preservar el funcionamiento eficiente y avanzado del mismo. Enfatizó la necesidad de alejar al Consorcio de cualquier intento de politización y localismo, ya que considera que esto garantizará su buen funcionamiento y progreso.

El presidente del Principado de Asturias también señaló que la inauguración de la planta de tratamiento es un paso más hacia la transición ecológica, considerando que el futuro de la región depende de ser "verde, sostenible y digital". En contraposición a los negacionistas, defendió la importancia de avanzar hacia un nuevo modelo económico y enfatizó que la transición ecológica es la mejor garantía de futuro.

En relación a la nueva planta, se destacó su gran capacidad, con un presupuesto de 62,5 millones de euros, y su tecnología avanzada. Se explicó que parte de los residuos tratados en esta instalación podrán ser utilizados por empresas de reciclaje, lo que la convierte en un impulsor clave de la economía circular.

En cuanto a los ciudadanos, se les incentivó a reciclar más, ya que esto no solo contribuirá a un planeta más sostenible, sino que también tendrá un impacto positivo en el bolsillo de cada individuo. Se subrayó la importancia de separar adecuadamente los residuos desde casa para maximizar el reciclaje.

La presidenta Nieves Roqueñí precisó que esta nueva planta es fundamental para cumplir con los objetivos de reciclaje establecidos por la legislación europea, ya que actualmente solo se recicla alrededor del 24% de los residuos gestionados por Cogersa. Con la planta en funcionamiento, se espera duplicar las tasas de reciclaje y alcanzar el 50% de material reciclado, acercándose así al objetivo del 55% para 2025.

Roqueñí también destacó la necesidad de establecer un plan integral de residuos para una economía circular, que aborde las nuevas obligaciones legales, como la separación de biorresiduos y aceites vegetales, residuos textiles y residuos peligrosos del hogar.

Finalmente, se resaltó que la puesta en marcha de esta planta marca un hito importante en el proceso de transición hacia una economía circular y posicionará a Asturias como líder en esta área.