El panorama de la Policía Local de Gijón enfrenta desafíos significativos en su búsqueda de una plantilla adecuada. Alejandro Gallo, jefe del cuerpo, ha subrayado en una reciente comparecencia que todavía queda un camino por recorrer en cuanto a la dotación de personal, esto tras la jubilación anticipada de 2019 que resultó en la salida de 120 agentes. La Relación de Puestos de Trabajo (RPT) establece un total de 331 efectivos, pero actualmente solo se cuenta con 300, de los cuales 30 son interinos, lo cual genera incertidumbre sobre la estabilidad del servicio.

En el contexto de esta situación, Gallo hizo énfasis en que existe un proceso selectivo activo mediante el cual se están cubriendo 19 plazas, además de prever una nueva oferta para 23 posiciones adicionales. Sin embargo, resaltó que el proceso desde la convocatoria hasta la incorporación efectiva de los nuevos agentes puede demorar hasta un año, lo que retrasa la solución a los problemas de plantilla que aquejan a la comunidad.

Por otro lado, la incorporación de los nuevos mandos policiales es un paso importante para enfrentar las necesidades del municipio, aunque Gallo advirtió que los 11 agentes que han asumido sus nuevos cargos son solo una parte de lo que realmente se requiere para abordar los retos que presenta Gijón. Según su valoración, el número de jubilaciones se ha estabilizado en una media de cinco o seis al año, lo que sugiere que la situación podría mejorar a largo plazo, siempre que se garantice una adecuada planificación y dotación de personal.

Un tema relevante también surgió en la conversación sobre la nueva Comisaría de la Policía Local. Gallo fue claro al manifestar que, para él, el cambio de instalaciones no es una prioridad. Lo crucial, según su perspectiva, recae en asegurar que haya un respaldo humano suficiente para atender como es debido las demandas y las expectativas de la ciudadanía gijonesa.

La toma de posesión de los nuevos mandos fue un evento presidido por la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón. Durante su intervención, Moriyón resaltó la importancia de que el cuerpo policial ejerciera su labor desde un lugar de convicción y compromiso, lo que constituye, a su juicio, una clara reafirmación del carácter de servicio público que este representa.

La alcaldesa también destacó las cualidades de Alejandro Gallo, enfatizando su capacidad de entender las necesidades de Gijón y la relación que los agentes deben mantener con la comunidad. En un mensaje alentador, Moriyón expresó que el cariño recibido por parte de la ciudadanía hacia la Policía Local es fundamental para alcanzar el éxito en su labor. Finalmente, extendió sus mejores deseos a los nuevos mandos en su carrera tanto profesional como personal, con la esperanza de que bajo su liderazgo, la Policía Local continúe fortaleciendo su vínculo con los vecinos de Gijón.