OVIEDO, 20 de noviembre.

En un llamado apasionado a la colaboración y a la divulgación científica, la doctora Lourdes Marcano, experta en Física y profesora en la Universidad de Oviedo, ha enfatizado la necesidad de "llevar el laboratorio a las calles" y promover la investigación multidisciplinaria. Su intención es clara: que el arduo trabajo que realizan diversos grupos de investigación tenga un impacto tangible más allá de los muros académicos.

Marcano destacó que dentro de Asturias se están llevando a cabo avances significativos en distintos campos del conocimiento. No obstante, advirtió que la falta de comunicación entre investigadores podría impedir el desarrollo de terapias innovadoras. "Es fundamental que hables con tus colegas, incluso si están en el edificio de enfrente. Podrían estar a la vanguardia de una solución terapeútica que aún no has considerado", aseguró, subrayando la importancia de no solo comunicar el conocimiento científico a la sociedad, sino de mejorar la interacción entre los propios investigadores.

Estas reflexiones surgieron durante un coloquio celebrado en la Biblioteca del Edificio Histórico de la Universidad de Oviedo, como parte del Encuentro Informativo Científico titulado 'Robótica y salud: la ciencia del presente'. Además de Marcano, el panel incluyó a la doctora Alba Morán, especialista en Biomedicina y Oncología y miembro del Instituto Universitario de Oncología de Asturias; Borja Sánchez, consejero de Ciencia, Empresas, Formación y Empleo del Gobierno de Asturias; y Eva Pando, directora de la Fundación Caja Rural de Asturias.

Coincidiendo en sus intervenciones, todos los ponentes afirmaron la vital importancia de acercar las labores de investigación a la ciudadanía, las administraciones y las instituciones privadas para que los descubrimientos científicos tengan un efecto real en la sociedad y puedan atraer mayores inversiones hacia estos empeños.

En este contexto, Marcano enfatizó el papel crucial de la educación, no solo como herramienta para discernir entre información precisa y desinformación, sino también para valorar adecuadamente la ciencia misma. “Iniciativas como la Cátedra de Comunicación Científica que se planea instaurar en la Universidad de Oviedo son fundamentales para enfrentar el desafío que presenta la desinformación", explicó. "Hoy en día, al navegar por plataformas como YouTube, TikTok o Instagram, uno puede encontrarse con un abismo de ideas, desde los más extremos terraplanistas hasta divulgadores respetados".

Alba Morán añadió que para contrarrestar los bulos es esencial ofrecer información veraz y fomentar una cultura científica sólida en la sociedad. "Es un reto captar la atención de alguien durante largos periodos; no obstante, hay verdades que requieren más tiempo para ser comprendidas que un mero mensaje de 30 segundos", señaló, resaltando que desmentir una mentira compleja puede exigir aprendizaje y concentración.

En concordancia con este pensamiento, el consejero de Ciencia, Borja Sánchez, insistió en la necesidad de cultivar la cultura científica. "La ciencia no es solo una acumulación de conocimientos", sostuvo, "también es un proceso que nos enseña a dudar, a contrastar información y, si es posible, buscar múltiples fuentes".

Además, subrayó la importancia de diferenciar entre quienes difunden información bien investigada y quienes realizan publicaciones apresuradas y superficiales. "Es vital saber quién tiene el rigor y la seriedad para contrastar lo que se presenta", afirmó.

Durante el coloquio, los intervinientes también debatieron sobre la relación entre la comunicación científica y la posibilidad de obtener financiación para impulsar la investigación. Morán compartió su experiencia personal, mencionando que en su trayectoria investigadora sentía la necesidad de "vender" la relevancia de su trabajo para conseguir los fondos necesarios. "La capacidad de comunicar lo que se hace en un laboratorio es esencial", reflexionó.

Por su parte, Eva Pando, directora de la Fundación Caja Rural de Asturias, resaltó la importancia de "colocar al investigador en el estatus que merece" y la necesidad de "conocer lo que se está realizando en el campo". Sin un entendimiento adecuado, enfatizó, resulta complicado transmitir la relevancia de la investigación a los decisores en las instituciones. La Fundación ha invertido, desde 2008, más de 2 millones de euros en la investigación sobre mutaciones en los cánceres de ovario y mama, llevada a cabo en el Laboratorio de Oncología Molecular del HUCA.

A medida que se van publicando resultados y se desarrollan biomarcadores que podrían contribuir a la medicina personalizada o incluso a la prevención, Pando insistió en que "es crucial comunicar este conocimiento", ya que es necesario convencer a otros de su importancia durante el análisis de resultados.