En la ciudad de Oviedo, el pasado 3 de noviembre, se llevó a cabo un emotivo despliegue de solidaridad por parte de más de un centenar de asturianos, quienes, entre guardias civiles, policías, miembros de protección civil y de los servicios de emergencia, se disponen o están siendo trasladados a Valencia para colaborar en la respuesta a la crisis provocada por la DANA en la región de Levante.

Un destacamento de 30 guardias civiles asturianos ha partido este lunes hacia Valencia, mientras que 32 técnicos, capataces y bomberos forestales de la BRIF con base en Tineo también se han unido a esta noble causa.

Además, en respuesta a la petición del Puesto de Mando de Valencia ante la situación de emergencia por la DANA, bomberos del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) y de la ciudad de Oviedo se han desplazado a la zona para prestar su colaboración, acompañados de vehículos y equipamiento especializado.

El Ayuntamiento de Oviedo ha contribuido con el envío de un camión grúa, sumándose a los esfuerzos de los efectivos del 112 de Asturias que ya se encuentran operando en Valencia con un helicóptero y tres operarios desde el inicio de la crisis. Asimismo, el 112 ha ofrecido su equipo canino y una delegación de Protección Civil de Siero se encuentra también en Valencia apoyando en tareas de limpieza y logística en las zonas más afectadas por la DANA.

En un gesto solidario, diez agentes de la Policía Local de Langreo y tres miembros de Protección Civil se disponen a desplazarse a las áreas damnificadas para brindar su asistencia y ayuda sobre el terreno.

El domingo pasado, en respuesta a la solicitud de Aguas de Valencia, la Empresa Municipal de Aguas de Gijón ha enviado un grupo de operarios y vehículos especializados para colaborar en labores de emergencia. Además, varios ayuntamientos asturianos han ofrecido sus recursos, como los 21 efectivos de la Policía Local de Avilés que se encuentran en disposición de prestar ayuda en la región afectada si así se requiere.

Por otra parte, el Principado ha puesto a disposición su sistema sanitario en caso de necesidad, ofreciendo la asistencia de tres médicos forenses y un auxiliar de autopsias, mientras que Hunosa ha ofrecido a la Generalitat la colaboración de la Brigada de Salvamento Minero y sus instalaciones residenciales en las comunidades afectadas.