La sidra asturiana, la bebida ideal para brindar como un asturiano
Asturias es una región llena de tradiciones, paisajes increíbles y una gastronomía de las más reconocidas en todo el mundo. Pero si hay una bebida que representa a esta hermosa región de España, es la sidra asturiana.
Esta bebida refrescante, de ligero sabor dulce y con un contenido de alcohol moderado, es la compañera ideal para celebrar momentos especiales y convivir con amigos y familiares. En este artículo, te llevaré a través de la historia, la producción y la cultura en torno a la sidra asturiana, al mismo tiempo que te doy algunos consejos para poder disfrutarla como un verdadero asturiano.
Historia de la sidra asturiana
La sidra asturiana tiene una larga historia que se remonta a tiempos muy antiguos. Se cree que, ya en la época romana, los pobladores de esta región consumían bebidas fermentadas elaboradas con manzanas. Sin embargo, la historia documentada de la sidra asturiana comienza en el siglo XIII, cuando se construyeron las primeras llagares, lugares especializados en la elaboración de sidra.
Durante siglos, los llagares se mantuvieron como centros neurálgicos de la producción de sidra, particularmente en áreas rurales de la región, donde la sidra continuó siendo una bebida popular y de consumo diario. De hecho, la sidra asturiana fue tan arraigada en la cultura regional que incluso fue utilizada en diferentes rituales religiosos y celebraciones médicas.
La producción de sidra asturiana
La sidra asturiana se elabora a partir de manzanas seleccionadas y maduras, que son recolectadas entre los meses de septiembre y noviembre. Los frutos son prensados en un molino para extraer su jugo, el cual es depositado en grandes recipientes de madera, conocidos como cubas, para que fermente.
El proceso de fermentación es lento y puede durar hasta seis meses, durante los cuales la sidra debe ser trasvasada de un recipiente a otro para eliminar las impurezas y oxigenar la bebida. Finalmente, la sidra es embotellada y está lista para ser disfrutada.
Cultura en torno a la sidra asturiana
La sidra asturiana es mucho más que una bebida. En realidad, está rodeada de una serie de rituales y tradiciones que la hacen única.
Uno de los actos más característicos es el escanciado. En la sidra asturiana, el escanciado es un proceso de servicio que consiste en verter la sidra desde una botella con un golpe y desde una altura determinada para que al caer, la bebida se oxigene y libere su sabor y aroma.
Otro ritual importante es la romería de la sidra. Durante los meses de verano y otoño, numerosas localidades asturianas celebran esta festividad para rendir homenaje a la sidra, con degustaciones gratuitas en las calles y en los bares de la ciudad.
Consejos para disfrutar la sidra asturiana
Si quieres disfrutar de la sidra asturiana como un auténtico asturiano, hay algunos aspectos que debes tener en cuenta:
- Elige una buena sidra: Lo ideal es elegir una sidra de calidad, preferiblemente elaborada de forma tradicional en alguno de los llagares de la región.
- Escancia correctamente: Por norma general el escanciado se realiza en grupos. Lo ideal es mantener la botella a unos 45º respecto al vaso, dándole un golpe y vertiendo la sidra rápidamente.
- Acompaña la sidra: La sidra se acompaña de platos ligeros como el queso Roquefort, chorizo, jamón ibérico, entre otros.
- Conoce su temperatura: La sidra asturiana debe servirse a una temperatura que ronde los 8º C.
Conclusiones
La sidra asturiana es un patrimonio cultural de España y un verdadero tesoro de la región asturiana. Esta bebida, con sus rituales y tradiciones, nos habla de su rica historia y nos permite disfrutar de un momento de convivencia con familiares y amigos. Espero que esta guía te haya acercado a la cultura de la sidra asturiana y que te animes a disfrutarla como un auténtico asturiano. ¡Salud!