OVIEDO 1 de febrero. En el corazón de Asturias, la localidad de Sama de Langreo ha sido testigo este sábado de una conmoción colectiva que rechaza enérgicamente la violencia machista. Este doloroso clamor surge tras el presunto asesinato de una mujer de 40 años a manos de su pareja, un hombre de 72, durante la noche del viernes en esta comunidad.

La respuesta del Gobierno, junto al Principado de Asturias y el Ayuntamiento de Langreo, fue rápida y decidida. A las 17:00 horas de este sábado, se convocó una concentración que reunió a cientos de personas para condenar este acto de violencia. La Policía Nacional continúa con la investigación correspondiente y ya ha detenido al presunto autor del crimen. En un gesto de duelo y solidaridad, el Ayuntamiento de Langreo ha declarado tres días de luto oficial a partir del lunes.

Esta concentración no fue un evento aislado; diversos colectivos feministas y representantes de los principales partidos políticos asturianos se unieron en acto de unidad. La manifestación, que también resonó en otros concejos de la región, como los de las principales ciudades de Oviedo, Gijón y Avilés, demostró el amplio rechazo social a esta tragedia, al suceder en múltiples lugares al mismo tiempo.

La víctima, originaria de Cuba, deja tras de sí a tres jóvenes hijos que ahora quedan huérfanos, con edades comprendidas entre los 15 y los 7 años. El agresor, vecino de Langreo, no es un desconocido para la justicia; cuenta con antecedentes por violencia de género desde 2015, lo que subraya la urgencia de abordar de manera efectiva esta problemática social.

En sus declaraciones a los medios, el presidente del Principado, Adrián Barbón, expresó su profunda condena hacia este crimen horrendo y manifestó su esperanza de que la justicia “actúe de manera contundente” en este caso. Asimismo, reconoció la valentía de dos jóvenes que intentaron intervenir y enfrentar al agresor, resaltando la necesidad de una sociedad que valore y proteja a quienes se atreven a luchar contra la violencia.

Por su parte, el presidente del Partido Popular asturiano, Álvaro Queipo, también presente en la concentración, subrayó que “ninguna sociedad moderna puede convivir con esta atrocidad.” Al tiempo, extendió su “cariño del mundo” a la familia de la mujer asesinada, recordando que este tipo de actos deben ser erradicados de nuestro entorno.