OVIEDO, 8 de julio.

Este martes, un grupo de representantes de la plataforma comunitaria “El Campillín no se toca” y la asociación vecinal Oviedo Redondo ha presentado su firme postura en el Ayuntamiento, abogando por un entorno del parque El Campillín completamente “libre de coches”. Se oponen rotundamente a la propuesta del Ayuntamiento de construir un aparcamiento subterráneo en esa área central de la ciudad.

Durante una reunión con el alcalde Alfredo Canteli y el concejal de Urbanismo Ignacio Cuesta, José Manuel Díez, portavoz de la plataforma, y Manuel Almeida, presidente de Oviedo Redondo, expresaron su preocupación por los planes municipales que se presentan para el área en cuestión.

Al finalizar el encuentro, los activistas se dirigieron a los medios y, aunque reconocieron que la infografía presentada se ve atractiva, manifestaron sus dudas sobre el impacto que podría tener la construcción del aparcamiento en el subsuelo del parque.

Desde la perspectiva de la plataforma “El Campillín no se toca”, este proyecto podría incrementar el tráfico en los barrios circundantes, lo que también podría traducirse en la pérdida de plazas de aparcamiento gratuitas para los residentes y complicar el acceso al colegio de Los Dominicos.

Los miembros de la comunidad sostienen que existen “otras ubicaciones” dentro del barrio donde podría construirse un aparcamiento sin afectar al parque El Campillín. Según explicaron, el plan del Ayuntamiento incluye la creación de una “plaza de hormigón” junto a una “zona arbolada” en la parte baja del parque.

Por su parte, Manuel Almeida, presidente de Oviedo Redondo, expresó su descontento ante la posibilidad de que el proyecto replantee la eliminación de “todos los árboles” en la parte baja del Campillín, que serían reemplazados por nuevas plantas tras la finalización de las obras. El Ayuntamiento ha estimado que las actuaciones podrían iniciar en un plazo de año y medio.