Las repercusiones del "frenazo" en las inversiones podrían desencadenar un efecto dominó que afectaría a múltiples sectores y municipios de la región.

En un reciente informe, el número 72 del Observatorio Regional REGIOlab, perteneciente a la Universidad de Oviedo, se analizan las posibles consecuencias de la decisión de la multinacional ArcelorMittal de no avanzar en la construcción de una planta de reducción directa de mineral de hierro (DRI) en su factoría de Gijón. Este informe destaca un panorama alarmante, que podría significar una reducción del valor añadido que equivaldría a más de un 1,6 por ciento del Producto Interior Bruto de la región, además de la pérdida de más de 4.000 empleos a tiempo completo (específicamente, 4.243 puestos).

Las conclusiones del análisis, que fueron recogidas por Europa Press, indican que las consecuencias de esta decisión trascenderían el ámbito de ArcelorMittal y del sector metalúrgico; de hecho, se anticipa que su impacto se dejaría sentir en todo el tejido productivo regional, afectando a prácticamente todos los municipios de diversas maneras.

El informe subraya que el monto de inversión que se detendría asciende a aproximadamente 5.000 millones de euros para las instalaciones de ArcelorMittal en Europa, de los cuales cerca de 798 millones estaban destinados a la factoría gijonesa. Esta inversión, sin embargo, depende de la implementación de cambios normativos que la harían financieramente viable para la empresa.

Los municipios que más sentirían las consecuencias de la falta de esta inversión son aquellos con un alto grado de especialización laboral en el sector metalúrgico, como Gijón, Corvera y Avilés, donde se estima que se dejarían de crear 1.235, 523 y 526 empleos, respectivamente.

Aun así, otros concejos también sufrirían un impacto significativo por el parón en las inversiones. Se mencionan municipios como Oviedo, que podría perder 521 empleos, Castrillón con 295, y Carreño con 221. Además, en localidades con dinámicas industriales y logísticas relevantes, como Siero y Llanera, se podría superar el centenar de empleos perdidos, con estimaciones de 165 y 138, respectivamente.

Se ha destacado que los empleos potencialmente creados podrían ir aún más allá, ya que teniendo en cuenta el total de concejos de Asturias, se estima que se podrían movilizar más de 600 puestos de trabajo a tiempo completo.

El estudio resalta que el impacto más inmediato de esta decisión afectaría de manera directa a la generación de riqueza y empleo en las instalaciones de la compañía en la región, lo que podría traducirse en una disminución en su producción y en un ajuste significativo de su plantilla.

Asimismo, los efectos indirectos sobre otros sectores también se manifestarían, dado que las fábricas de ArcelorMittal en Asturias dependen de bienes y servicios producidos por diversas industrias para su funcionamiento, como son la energía, materias primas y servicios de transporte, que también experimentarán consecuencias negativas.

Adicionalmente, estas actividades industriales se apoyan en la producción de otros sectores en sus procesos, generando así un efecto multiplicador que se suma al impacto inicial causado por la suspensión de las inversiones.