Oviedo, 16 de junio.

El dispositivo de seguridad para el partido de ida de la final del play-off de ascenso a la Primera División de la Liga Nacional de Fútbol Profesional Masculino entre el Real Oviedo y el RCD Espanyol, que se llevará a cabo este domingo a las 18:30 horas en el Estadio Carlos Tartiere, incluirá controles de alcoholemia aleatorios. Aquellas personas que muestren signos de embriaguez no podrán ingresar al estadio.

Estas medidas se han acordado durante la reunión de seguridad de esta semana, presidida por la Delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa, y a la que asistieron representantes del Real Oviedo, la Policía Nacional, la Guardia Civil, la Policía Local de Oviedo y la Jefatura Provincial de Tráfico.

Los partidos de play-off de ascenso fueron declarados de alto riesgo por la Comisión Permanente de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte.

La Policía Nacional, con la ayuda de la Policía Local de Oviedo, implementará un operativo en los alrededores del Estadio Carlos Tartiere y en las zonas con mayor concentración de aficionados desde la mañana del domingo.

Para este evento, la Policía Nacional movilizará diferentes unidades especiales como la UIP, UPR, Tedax, Subsuelo, Guías Caninos, Grupos de Atención al Ciudadano y Brigadas de Información.

En la reunión se expresó preocupación por la seguridad durante el trayecto habitual del autobús del equipo local desde el hotel Monte Naranco hasta el Estadio Carlos Tartiere. Por lo tanto, la Policía Local de Oviedo vallará todo el recorrido y se prohibirá el estacionamiento de vehículos para garantizar la seguridad del equipo y los aficionados.

A la afición se le recomienda no utilizar bengalas u otros dispositivos que puedan obstaculizar la visibilidad del conductor del autobús.