OVIEDO, 7 de octubre.

En un preocupante episodio ocurrido en la autovía del Cantábrico (A-8), la Guardia Civil ha detenido a un hombre de 62 años, residente en Tineo, quien fue sorprendido conduciendo a la alarmante velocidad de 237 kilómetros por hora. Según los informes del Instituto Armado, el suceso tuvo lugar la noche del pasado 11 de octubre, durante un control de velocidad dirigido por agentes del Destacamento de Tráfico de Luarca, y es significativo que este conductor superara el límite permitido en dicha vía por una asombrosa diferencia de 117 km/h.

Con el fin de hacer cumplir las leyes de seguridad vial, los agentes lograron localizar e interceptar el vehículo del infractor a unos treinta kilómetros del punto inicial de control. Las acciones legales correspondientes por un presunto delito vinculado a la seguridad vial, específicamente por exceder en más de 80 km/h el límite de velocidad en una carretera interurbana, están siendo investigadas por el Equipo de Investigación de Siniestros de Ribadesella, parte de la Unidad de Investigación de Seguridad Vial del Sector de Tráfico en Asturias. Posteriormente, el individuo fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Castropol.

Las consecuencias de este tipo de infracción, bajo el contexto del Código Penal, pueden incluir penas de prisión que varían entre 3 y 6 meses, sanciones económicas que oscilarán entre 6 y 12 meses, así como trabajos comunitarios que van desde 31 a 90 días. Además, se contempla la suspensión del permiso de conducir por un período que podría extenderse de 1 a 4 años.

Vale la pena mencionar que, en el mismo control, se detectaron otros tres conductores que también excedieron significativamente los límites de velocidad durante el último año. Esta actividad se enmarca en las estrategias de vigilancia del Sector de Tráfico de Asturias, cuyo propósito primordial es resguardar la seguridad en las carreteras mediante la implementación de controles diarios, tanto estáticos como móviles, en diversas ubicaciones y horarios.

La Guardia Civil y la Jefatura Provincial de Tráfico hacen un llamado urgente a la conciencia de los conductores, enfatizando que circular a 237 km/h representa un peligro extremo, especialmente durante la circulación nocturna. Insisten en la necesidad de que todos los usuarios de la vía respeten los límites de velocidad para preservar no solo su propia vida, sino también la de los demás.