OVIEDO, 11 de enero.

La Consejería de Fomento, Cooperación Local y Prevención de Incendios ha puesto en marcha un importante concurso, con un presupuesto de 70.000 euros, para la creación de un inventario que evalúe los taludes a lo largo de la carretera AS-114, que enlaza los municipios de Cangas de Onís y Panes.

Este inventario tiene como objetivo fundamental identificar y calificar la susceptibilidad de dichos taludes ante eventuales inestabilidades, lo que representa un paso crucial en la mejora de la seguridad vial. El plazo para que las empresas interesadas presenten sus ofertas se extenderá hasta el 27 de enero, de acuerdo con la información facilitada por el Gobierno asturiano.

La decisión de implementar este estudio surge tras las trágicas experiencias vividas, incluida la estabilización necesaria en el kilómetro 38,4 de la carretera, donde un deslizamiento de tierra resultó en un accidente mortal en octubre de 2023. Estas labores de estabilización, que se llevaron a cabo hasta agosto de 2024, implicaron una inversión que supera los 2,7 millones de euros y abarcaron más de 1.000 metros cuadrados de ladera.

El plan contempla clasificar los taludes en función de su vulnerabilidad a deslizamientos y desprendimientos, dotando a las autoridades de información técnica precisa que facilite la implementación de acciones preventivas y de conservación en la carretera.

Esta no es la primera vez que el Gobierno asturiano aborda la seguridad en vías críticas; previamente se han realizado estudios en otras carreteras, tales como el corredor del Narcea (AS-15) y la AS-117, que conecta Riaño con el Puerto de Tarna.

Por otra parte, el Principado ha asignado una significativa partida de 500.000 euros en los presupuestos de 2025 para el desarrollo de un Mapa de Prevención de Argayos, acompañado de un sistema de sensorización avanzada en la red de carreteras. Esta iniciativa se enmarca dentro de una estrategia global diseñada para elevar la seguridad vial y mantener nuestras infraestructuras, cuyos cimientos se asientan también en el inventario de taludes de vías críticas como la AS-114. Estas acciones son esenciales para identificar las áreas más susceptibles a deslizamientos y desprendimientos.

El proyecto del Mapa de Prevención de Argayos, junto con la red de sensorización, permitirá llevar a cabo un monitoreo en tiempo real de los taludes, optimizando así la gestión del riesgo y mejorando la capacidad de respuesta ante situaciones de emergencia. De esta manera, no solo se complementa, sino que se amplía el trabajo realizado anteriormente en el inventario de taludes, ofreciendo una solución integral que busca garantizar la seguridad y sostenibilidad de las infraestructuras viales en el Principado.