OVIEDO, 21 de agosto.

El Partido Animalista (Pacma) ha dado a conocer recientemente que ha elevado una denuncia ante la Guardia Civil, específicamente a su unidad Seprona, en reacción al anuncio de un sorteo de una potra de apenas cinco meses de edad. Esta iniciativa ha sido promovida por la Asociación Juvenil El Privilegio en las plataformas digitales como parte de las celebraciones de las fiestas de San Justo en Páramo-Teverga, en Asturias.

El evento, programado para el 25 de agosto de 2025, estipula que el ganador de la rifa podrá escoger entre recibir a la potra o, como alternativa, un premio en efectivo de 700 euros. Dicho sorteo está vinculado a los números del cupón de la ONCE, lo que ha suscitado una serie de críticas.

Pacma considera que esta acción infringe la Ley 7/2023, que protege los derechos y el bienestar de los animales, la cual prohíbe de manera explícita el uso de seres vivos como premios, incentivos o en sorteos. Este tipo de prácticas, según la formación política, pone en riesgo el bienestar de los animales y su correcto manejo.

El partido también manifiesta su preocupación por la falta de control en el proceso de entrega del animal, señalando que no se exige ningún tipo de verificación sobre el perfil del destinatario. Esto incluye aspectos fundamentales como la edad y la preparación del nuevo propietario, así como la ausencia de antecedentes que puedan descalificar a alguien para la tenencia de animales. Además, destacan que la asociación juvenil ya había llevado a cabo sorteos similares en el pasado, lo que se puede corroborar a través de sus redes sociales.

Pacma, que ha presentado un modelo de la papeleta del sorteo como prueba, advierte que estas acciones son consideradas infracciones graves según la legislación de bienestar animal, que contempla sanciones que van desde 10,001 hasta 50,000 euros y puede incluir medidas como el decomiso del animal, el cierre de actividades o la prohibición de manejar animales.

La organización exige la suspensión inmediata del sorteo, la apertura de una investigación pertinente y la reubicación de la potra en un santuario o centro de protección animal, donde se pueda asegurar su bienestar y protección.